domingo, 30 de agosto de 2009

Lo fatal, de Rubén Darío

LO FATAL



“Dichoso el árbol que es apenas sensitivo,

y más la piedra dura,

porque esa ya no siente,

pues no hay dolor más grande

que el dolor de ser vivo,

ni mayor pesadumbre

que la vida consciente.



Ser, y no saber nada,

y ser sin rumbo cierto,

y el temor de haber sido un futuro terror...

y el espanto seguro

de estar mañana muerto,

y sufrir por la vida y por la sombra

y por lo que no conocemos

y apenas sospechamos

y la carne que tienta

con sus frescos racimos,

y la tumba que aguarda

con sus fúnebres ramos,

y no saber adonde vamos,

ni de donde venimos...!”